
El ser humano para poder vivir en armonía con sus semejantes ha tenido que crear reglas de conducta, a las que ha llamado Normas.
Estas normas son de diversa índole: Religiosas, sociales, morales y jurídicas.

Respecto a las primeras, existe todo un derecho llamado canónico, en donde están comprendidas todas las normas que rigen a la Iglesia Católica, por ejemplo.
Esto no es ajeno a otras religiones, ya que poseen normas que rigen sus actividades y que observan la conducta de quienes acuden a ellas. En caso de que los asistentes no cumplan con lo observado, existen sanciones, sin embargo, éstas son de carácter espiritual. Por ejemplo, si uno no asiste a misa los Domingos, la sanción es el tener que confesarse y cumplir la penitencia impuesta por el confesor.
Existen también las normas sociales que son aquellas que el ser humano ha construido como parte de la sociedad y que todos aceptan y entienden, además no es necesario dejarlas por escrito. En caso de no cumplir con estas normas, la sanción puede ser la desaprobación y el descrédito de los demás. Por ejemplo, si una persona no saluda a los demás al momento de llegar a una reunión a la que fue invitado, puede que los asistentes se sientan ofendidos por ello y terminen por rechazarlo o ignorarlo.
Las normas morales son aquellas que emanan desde el interior de cada ser humano y que son moldeadas por la cultura en la que se desenvuelve. Por ejemplo, el dar el asiento a la mujer embarazada en el transporte público o el vitar que los menores de edad consuman alcohol o cualquier otra sustancia que pueda afectar su desarrollo físico, emocional o cognitivo. En caso de incumplir con una norma moral, no existe un castigo o sanción como tal, en lugar de ello, se presenta un cargo de conciencia o malestar emocional que se elimina revirtiendo el hecho que lo originó.
Por último, tenemos a las normas jurídicas, que son aquellas normas que se han convertido en leyes, es decir en que su observancia y cumplimiento es obligatorio para todos los ciudadanos (mayores de edad), sin excepción. En caso de incumplimiento, las sanciones las dicta el poder judicial de la federación y pueden ir desde una amonestación, hasta la privación de la libertad.
Es importante reflexionar acerca de la importancia de las normas, reglas que permiten la convivencia entre los seres humanos.